La materia orgánica que llega al suelo, tras un proceso de descomposición, sufre profundas modificaciones en su composición hasta dar lugar a las llamadas sustancias húmicas, que son propias y exclusivas del suelo, es lo que se conoce como proceso de humificación. En este proceso interviene un gran número de grupos de microorganismos, unos específicos y otros no.
Estas sustancias húmicas son las que persisten en el suelo de forma aislada o las que forman complejos con la fracción mineral, son el constituyente principal, que no mayoritario, de los horizontes A y de algunos B formados por acumulación de los complejos móviles formados en el proceso anterior, horizontes Bh ó Bhs.
Pero esta materia orgánica no permanece de forma indefinida en el suelo sino que, tras un tiempo, sufre el ataque microbiano y termina mineralizandose y desapareciendo como tal. El tiempo de residencia de la materia orgánica en el suelo está en función de los llamados coeficientes de humificación y de mineralización. Cuanto mayor es este tiempo también lo es la acumulación de materia orgánica, de modo que para un mismo aporte, el contenido del suelo varía en función de la variable anterior.
La materia orgánica del suelo es una fuente de alimentos para la fauna del suelo y contribuye a la biodiversidad del suelo actuando como depósito de nutrientes del suelo tales como nitrógeno, fósforo y azufre; de hecho, es el elemento más importante para la fertilidad del suelo. El carbono orgánico del suelo incide en la estructura del suelo y mejora el entorno físico, lo que hace que las raíces penetren con mayor facilidad.
La materia orgánica absorbe agua (puede retener hasta seis veces su peso en agua), por lo que es vital para la vegetación en suelos naturalmente secos y arenosos. Los suelos que contienen materia orgánica tienen una buena estructura que mejora la infiltración del agua y reduce la exposición a la compactación, la erosión, la desertificación y los corrimientos de tierras.
A escala mundial, los suelos contienen alrededor de dos veces más de carbono que la atmósfera y tres veces más que la vegetación. Los suelos de Europa representan un sumidero enorme de carbono orgánico, cifrado en unos 75 000 millones de toneladas. Cuando disminuye la materia orgánica del suelo, se libera dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera y, cuando aumenta, se absorbe CO2 de la atmósfera.BUENO COMPAÑEROS ESTO ES TODO POR HOY ESPERO Y SEA DE SU AGRADO LOS SALUDA DIANA IVETH HERNANDEZ MATEOS IV "C".
Estas sustancias húmicas son las que persisten en el suelo de forma aislada o las que forman complejos con la fracción mineral, son el constituyente principal, que no mayoritario, de los horizontes A y de algunos B formados por acumulación de los complejos móviles formados en el proceso anterior, horizontes Bh ó Bhs.
Pero esta materia orgánica no permanece de forma indefinida en el suelo sino que, tras un tiempo, sufre el ataque microbiano y termina mineralizandose y desapareciendo como tal. El tiempo de residencia de la materia orgánica en el suelo está en función de los llamados coeficientes de humificación y de mineralización. Cuanto mayor es este tiempo también lo es la acumulación de materia orgánica, de modo que para un mismo aporte, el contenido del suelo varía en función de la variable anterior.
La materia orgánica del suelo es una fuente de alimentos para la fauna del suelo y contribuye a la biodiversidad del suelo actuando como depósito de nutrientes del suelo tales como nitrógeno, fósforo y azufre; de hecho, es el elemento más importante para la fertilidad del suelo. El carbono orgánico del suelo incide en la estructura del suelo y mejora el entorno físico, lo que hace que las raíces penetren con mayor facilidad.
La materia orgánica absorbe agua (puede retener hasta seis veces su peso en agua), por lo que es vital para la vegetación en suelos naturalmente secos y arenosos. Los suelos que contienen materia orgánica tienen una buena estructura que mejora la infiltración del agua y reduce la exposición a la compactación, la erosión, la desertificación y los corrimientos de tierras.
A escala mundial, los suelos contienen alrededor de dos veces más de carbono que la atmósfera y tres veces más que la vegetación. Los suelos de Europa representan un sumidero enorme de carbono orgánico, cifrado en unos 75 000 millones de toneladas. Cuando disminuye la materia orgánica del suelo, se libera dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera y, cuando aumenta, se absorbe CO2 de la atmósfera.BUENO COMPAÑEROS ESTO ES TODO POR HOY ESPERO Y SEA DE SU AGRADO LOS SALUDA DIANA IVETH HERNANDEZ MATEOS IV "C".
HOLA COMPAÑERA TU INFORMACIÓN ESTA BIEN PERO TE FALTO PONER MAS IMÁGENES SEPARAR UN POCO LAS LETRAS MAS GRANDES Y UN COLOR MAS RESALTANTE SE DESPIDE TU COMPAÑERA NIDIA SOTO PARRA DEL 4 SEMESTRE GRUPO C .
ResponderEliminarQue tal compañera poes veras que mi informacion tiene un color rojo en algunas letras y si la leeistes comprenderas que marco lo mas importante del tema en forma de resumen sin mas y en espera de tu comprencion quedo con tigo, hasta pronto,atte. Cándido Cueto Rodríguez
ResponderEliminarHola compañera tu información es buena pero te falto mas ademas no tuviste creatividad en editar la letra por que casi todo es de un mismo tamaño y esta de un mismo color espero que lo corrijas poniéndole mas imágenes que son la que hacen interesante un tema eso es todo se despide tu compañera CLARA RÍOS ISIDRO DEL 4º"C".
ResponderEliminarQue tal diana tu información me párese interesante pero es muy aburrida por que la letra es pequeña y casi no pusiste imágenes eso es todo se despide JUAN CARLOS RODRIGUEZ ROMÁN DEL 4º"C".
ResponderEliminarhola compañeros solo para decirles que su informacion me parece muy interesante solo que en algunos espacios les hace falta algunas imagenes y en algunos un poco mas de informacion. me despido soy su amigo Usiel Emiliano Reyes Cordova del 4 e asta pronto
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