jueves, 27 de mayo de 2010

Ciclo Carbonico



CICLO CARBONICO






El carbón es el cuarto elemento de mayor abundancia en el universo y es absolutamente esencial a la vida terrestre. En realidad, el carbón constituye la definición propia de vida y su presencia o ausencia ayuda a definir si una molécula es considerada orgánica o inorgánica. Cada organismo sobre la Tierra necesita del carbón ya sea para su estructura, su energía, o en el caso de los humanos, para ambos. Descontando el agua, somos mitad carbón. Además, el carbón se encuentra en formas tan diversas como en el gas de dióxido de carbón (CO2), y en sólidos como la caliza (CaCO3), la madera, plástico, diamantes y grafito.







En sus diferentes formas, el movimiento del carbón en la atmósfera, océanos, biosfera, y geoesfera está descrito en el ciclo carbónico (SE MUESTRA EN EL DIBUJO). Este ciclo consiste de varios bancos de almacenamiento de carbón (texto negro) y los procesos por los cuales varias de estos bancos o mantos intercambian carbón (las flechas moradas y los números). Si la cantidad de carbón que penetra en un manto es mayor de la que sale, el manto está considerado un pozo neto de carbón. Si la cantidad de carbón que sale de un manto es mayor de la que entra, el manto está considerado una fuente neta de carbón.







Dibujo. Una caricatura del ciclo global carbónico. Los mantos(en negro) son gigatoneladas (1Gt = 1x109 Toneladas) de carbón. Los flujos (en morado) son Gt de carbón por año.






El Ciclo Carbónico Biológico:



La biología ocupa un importante papel en el movimiento del carbón entre la tierra, océano y atmósfera a través del proceso de fotosíntesis y respiración. Virtualmente toda la vida multicelular en la Tierra depende de la producción de azúcares de la luz solar y del dióxido de carbón (fotosíntesis) y del desgaste metabólico (respiración) de esos azúcares para producir la energía necesaria para el movimiento, crecimiento y reproducción. Las plantas toman el dióxido de carbón (CO2) de la atmósfera durante la fotosíntesis y sueltan el CO2 a la naturaleza durante la respiración a través de las siguientes reacciones químicas:



Respiración:
C6H12O6 (materia orgánica) + 6O2
6CO2 + 6 H2O + energía



Fotosíntesis:
energía (luz solar) + 6CO2 + H2O
C6H12O6 + 6O2



A través de la fotosíntesis, las plantas verdes usan la energía solar para convertir el dióxido de carbón atmosférico en carbohidratos (azúcares). Las plantas y los animales usan estos carbohidratos (y otros productos derivados de estos) a través de un proceso llamado respiración, el reverso de la fotosíntesis. La respiración suelta la energía contenida en los azúcares para uso del metabolismo y cambia el "combustible" que es el carbohidrato en dióxido de carbón. Éste, a su vez, retorna a la atmósfera. Cada año, la cantidad de carbón tomada por la fotosíntesis y retornada a la atmósfera por la respiración es aproximadamente 1,000 veces mayor que la cantidad de carbón que se mueve a través del ciclo geológico en un año.



En la superficie de la tierra, el mayor intercambio de carbón con la atmósfera resulta de la fotosíntesis y de la respiración. Durante el día, en la estación de crecimiento, las hojas absorben la luz solar y toman dióxido de carbón de la atmósfera. A su vez, las plantas, los animales y los microbios del suelo consumen el carbón en materia orgánica y retornan el dióxido de carbón a la atmósfera. La fotosíntesis cesa en la noche cuando el sol no puede proveer la energía motriz para la reacción. Sin embargo, la respiración continúa. Este tipo de diferencia entre estos dos procesos está reflejado en los cambios de estación en las concentraciones atmosféricas del CO2. Durante el invierno, en el hemisferio norte, la fotosíntesis cesa cuando muchas de las plantas pierden sus hojas, pero la respiración continua. Esta condición lleva a un aumento en las concentraciones atmosféricas del CO2 durante le invierno, en el hemisferio norte.






En los océanos, los fitoplánctones (plantas marinas microscópicas que forman la base de la cadena alimenticia marina) usan carbón para producir conchas de carbonato de calcio (CaCO3). Estas conchas se asientan en el fondo del océano cuando los fitoplánctones mueren y se entierran en los sedimentos. Cuando se entierran, las conchas de fitoplánctones y otras criaturas pueden comprimirse a medida que pasa el tiempo y eventualmente se pueden transformar en caliza. Además, en ciertas condiciones geológicas, la materia orgánica puede ser enterrada y con el paso del tiempo formar depósitos de carbón que contienen combustible de carbón y petróleo. La materia orgánica que no contiene calcio, es la que se transforma en combustible fósil. Ambas formaciones, de caliza y de combustible fósil, son procesos biológicos controlados y representan hoyos de largo plazo para el CO2 atmosférico.


Bueno Esto es todo por el momento nos vemos en la proxima.. Su amigo Cristian Giovanni Huerta Torralba 4º C

2 comentarios:

  1. hola compañero tu información esta muy buena y completa pero te fallo ponerle mas imágenes pero de allí en fuera esta bien bueno se despide tu compañera Yaretdi M. Aguilar 4º c

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  2. a cámbienle el color de las publicaciones porque no se ve nada

    att: Yeratdi M. Aguilar 4ºc

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